
Cuando el reloj marque las doce de la noche, Castilla-La Mancha dirá hola al viernes 24 de septiembre de 2021 y se despedirá de las restricciones que han estado vigentes durante los últimos meses para frenar el avance de la pandemia de coronavirus. Los castellano-manchegos, a no ser por el uso de la mascarilla, que se mantiene en los mismos términos, podrán vivir exactamente igual que lo hacían antes de la explosión de la crisis sanitaria en marzo de 2020. Así lo ha decidido el Gobierno regional durante un Consejo de Gobierno extraordinario celebrado en el toledano Palacio de Fuensalida para aprobar el nuevo decreto de medidas anticovid que ya anunció días atrás el presidente Emiliano García-Page.
A partir de la medianoche del viernes, cuando se publicará el nuevo mandato en el Documento Oficial de la Región, Castilla-La Mancha elimina todas las limitaciones de aforo y horarios vigentes hasta este momento. Eso significa, entre otras cosas, que los bares podrán atender a sus clientes en la barra, que los castellano-manchegos podrán volver a bailar en la pista de las discotecas, que los grupos de amigos o las familias podrán comer todos juntos en la misma mesa de un restaurante sin importar cuántos sean, que los cines y los teatros volverán a ocupar todas sus butacas sin necesidad de mantener distancias de seguridad, que los campos de fútbol o las plazas de toros volverán a llenarse o que los usuarios de las instalaciones deportivas podrán volver a hacer uso de duchas y vestuarios, por ejemplo.
Así lo ha explicado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, durante una rueda de prensa en la que ha insistido en que todos los locales de hostelería, tales como bares, restaurantes, pubs y discotecas, podrán funcionar al cien por cien de su capacidad y cerrar a la hora que marquen las ordenanzas municipales, sin mayor limitación. Eso sí, fuera de ese sector, la venta de alcohol seguirá estando prohibida desde las 10 de la noche hasta las 8 de la mañana.
El momento de hacerlo
Según Fernández, este decreto aperturista que devuelve a Castilla-La Mancha a la normalidad ha podido ser aprobado gracias a que la campaña de vacunación contra el coronavirus alcanza ya a más del 84 % de la población castellano-manchega vacunable y a que el índice de contagio está «muy por debajo de uno», lo que hace que la indicendia acumulada de la enfermedad sea muy baja (83 casos por cada 100.000 habitantes durante los últimos 14 días) y que la capacidad asistencial tanto en los hospitales como en la atención primaria no se vea comprometida.
«Esta noche a las 00.00 horas podremos acercanos a una manera de relacionarnos más cercana a la normalidad, pero debemos seguir teniendo la responsabilidad que hemos demostrado, usando la mascarilla en los espacios interiores y en los exteriores cuando no se pueda mantener una distancia prudente o cuando haya aglomeraciones». le ha dicho el consejero a la sociedad castellano-manchega, a la que ha calificado de «excelente en su conjunto» y ha felicitado «con mayúsculas» por haber sido solidaria y responsable respondiendo masivamente a la campaña de vacunación.
«Bienvenidos a esta normalidad que acabamos de estrenar. Nos encontramos en niveles óptimos para tomar este tipo de decisiones puesto que la tendencia a la baja en los contagios es descendente y sostenida en el tiempo. De no seguir así tendríamos que volver a normas más restrictivas, pero estoy convencido de que no va a ser necesario porque la responsabilidad de toda la ciudadanía va a seguir siendo la que ha sido hasta ahora», ha finalizado el Fernández Sanz.