
Hola, buenos días soy Soledad Muñoz Oliver, ciudadana de Albacete capital, aunque oriunda de Ossa de Montiel. Soy trabajadora social, educadora social, antropóloga social y cultural, con formación superior en antropología aplicada y en estos momentos recién estrenada Doctora en antropología.

ASUNTO: dar a conocer una tesis doctoral que he desarrollado durante los últimos 7 años en la UCLM (Departamento de Filosofía, Antropología, Sociología y Estética) y que defendí el pasado jueves 18 de marzo en la Facultad de Humanidades de Albacete. El título: Género y parentesco en municipios rurales de la comarca Campo de Montiel. Las nueras en Ossa de Montiel (Albacete) y su vinculación con Villahermosa (Ciudad Real).
INTERÉS: La tesis es un homenaje a los pueblos. Plantea la necesidad de que la antropología rural aplicada y feminista se implemente para aportar su teoría y metodología al amplio marco discursivo actual sobre las nuevas ruralidades.
También por la urgencia de sostenibilidad de los pueblos que pueda acabar con la denominada “España Vacía” que tanto está preocupando tanto a instituciones públicas como privadas y a la población rural en su conjunto. En este contexto, las mujeres parecen ser parte de la solución y por eso en mi investigación planteo que si nos acercamos a conocer las estructuras de parentesco y de género en contextos más tradicionales como son los pueblos, podremos encontrar nuevos sujetos y nuevos relatos sobre “lo rural” que nos ofrecerán nuevos puntos de vistas y la posibilidad de planteamientos de acción diferentes a los actuales, siempre desde la singularidad local.
Por ser oriunda de Ossa de Montiel, he podido realizar mi investigación desde una posición y unos conocimientos situados, que junto a mi experiencia laboral de 25 años en municipios rurales de la provincia de Albacete, hacen de mi tesis un trabajo de investigación comprometido con nuestro territorio.
Los datos no ofrecen dudas, Albacete, Castilla-La Mancha y España en su conjunto son eminentemente rurales. Al amparo de todos los indicadores que nos ofrecen un escenario preocupante de despoblamiento, envejecimiento y masculinización de nuestros pueblos y bajo el paraguas del marco normativo y legislativo europeo, nacional, regional y provincial a favor de las áreas rurales, es urgente actuar.
La sostenibilidad y supervivencia de las poblaciones más pequeñas y más aisladas de las capitales se ha posicionado como una prioridad en las agendas políticas.
La pandemia por el COVID está dotando de nuevos valores a los pueblos sobre los cuales se están generando nuevas representaciones y nuevos significados que habría que aprovechar.
En conclusión, en estos momentos la antropología tiene mucho que aportar al conjunto de ciencias sociales y humanas en su interés por conocer y mejorar la vida de la ciudadanía que no es urbana.